«El inconciente que manda «

Al borde de acabarse cada año que la vida nos permitió vivir, uno hace balances. Que lo logré, que no lo logré…, que lo que me propuse y sí logré, fue a medias, o fue total; que el otro año tal vez sea mejor y etcétera ectetera. Todos cuentos chinos. El azar tiene algo que ver, y no soy nadie para ponerlo en dudas. Pero lo que sí puedo afirmar es que lo que hemos logrado mal o bien tiene un responsable directo y se llama «EL INCONSCIENTE» (grrrrrrrr!!!)
Hemos hecho lo que nos mandó a hacer y el resultado es lo que nuestra neurosis nos permitió cumplir de ese fatídico e inevitable mandato . Claro! es muy dificil sortear el parentesco de esos parientes jodidos y obligados llamados » los mecanismos de defensa». Y como en toda familia conflictiva, éstos tienen su lugar, para jodernos el resultado. «Serás lo que debas ser o serás el monigote de tu parrala neurótica» . Ahora bien, la culpa es de quien se deja joder. O sea, el toro se toma por las astas o te pasarás la vida zarandeado por él.
A pensar, a pensar, el balance del año es sí o sí la cara a la vista de nuestras cosas que nos joden y que ya conocemos, que pudimos afrontar o tal vez aún no, pero sabemos de qué se trata. O es la cara oculta que no nos animamos a ver por lo que la tapamos con un trapo como se suele hacer con los espejos. Pero ojo, el inconsciente sabe de nosotros aquello que nosotros no conocemos. Por lo tanto, es el enemigo oculto, y que nos habita para mayor desgracia!
Entonces, a zambullirse adentro de él como si fuera una piscina en el desierto. Llegará el momento en que lo tendremos domado. El saldo de eso, será el balance real, no mentiroso e inconfundible de cada fin de año. Cada año dejó los resultados que hicimos por las cosas. Y hasta con las más tristes! y no deseadas!.
El inconciente tiene un vecino a quien no saluda y que se llama DESEO. Si uno lo identifica y se hace amigo del deseo, ya son dos para luchar en su contra.
¡Que tengamos un buen año! como para mi lo fue. Sin recortes, «el mejor de los que recuerdo», luego de pelearme a trompadas con el mío. Auguri!!!!

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